domingo, 19 de diciembre de 2010

Vivir con miedo

Se le dan muchos nombres, violencia de género, machista, doméstica, son casi sinónimos  y todas ellos recogen muchas historias con demasiados denominadores comunes. Este tipo de violencia  es la principal causa de muerte o invalidez entre las mujeres europeas de 16 a 44 años, por encima del cáncer o de las enfermedades coronarias.  Más de la mitad de las denuncias por malos tratos son retiradas y se calcula que sólo 1 de cada 9 mujeres que sufren maltrato denuncia, cifras que causan escalofríos.
 

Vivir con miedo, miedo a no decir la palabra adecuada, miedo a pasarte con el punto de sal , miedo a hablar demasiado con alguien, miedo a llegar tarde, miedo, miedo y más miedo. La lista es infinita, es el día a día de muchas mujeres, yo lo recuerdo perfectamente. Eso es algo que deja una marca indeleble. Recuerdo una vez, tenia casi 14 años, que perdí el autobus. Llegaba media hora  tarde y a medida que me acercaba a casa empezé a temblar. Cuando doblé la esquina temblaba tanto que apenas podía caminar. Cuando subía las escaleras lloraba en silencio y al abrir la puerta no podía ni hablar. Mientras escribo esto hay muchas mujeres que se sienten como yo me sentí, vulnerables, indifensas, culpables de no se sabe qué, sufriendo en silencio e incluso avergonzadas, a merced  de maridos, novios, padres … seres de espíritu mezquino que les hacen creer que no merecen nada mejor.  Que no se puede vivir de otra manera.

Aquí os dejo algunos enlaces de interes:


Este post es en memoría de todas aquellas mujeres que han perdido la vida a causa de los malos tratos.

4 comentarios:

  1. Me encanta tu blog, muy interesante la temática y la exposición está a la altura de las problematicas denunciadas.
    http://elauvo.blogspot.com/
    Espero que te guste mi espacio

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  2. Hola Magdalena muchas gracias!!! He pasado por tu blog y es muy interesante tambien.

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  3. Gracias Patricia, por tu forma clara y rotunda de hablar sobre estos temas, en especial el "miedo". Hay muchas clases de miedo, pero todas ellas son un atentado contra la alegría y la libertad de vivir.
    Me siento muy identificada contigo en ese episodio que cuentas con tus 14 años, yo viví de niña en un entorno muy complejo de definir, pero cuanto más mayor me hacía, comprendí que fui creciendo rodeada de miedo, la educación que recibí fue "dictatorial" por decirlo de alguna manera, con una mentalidad posesiva y controladora... con 19 años me enfrenté a la dura decisión de "lanzarme a vivir mi vida sin miedo" o "a vivir la vida que "esa" persona había "programado y diseñado"... y que siempre justificaba con "el amor que me tenía" Hay muchas "torturas" que se hacen pasar por amor y eso es algo que desde niños deberían enseñarnos. No podemos tolerar "el supuesto amor" que exige, que grita, que impone, que es grosero y maleducado, que corta libertades, que anula al otro... y deberíamos ser capaces de ver las llamas de lejos, antes de adentrarnos en el fuego infernal de una tortura diaria.

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  4. Tus palabras me han conmovido Amparo, son un fiel reflejo de mi historia de la historia de muchos que hemos vivido este insano y retorcido concepto de amor. El robo de la identidad de la infancia y la reconstrucción como persona ha sido mi tarea durante muchos años. Yo nací con 18 años llena de miedos con la valentía de la inconciencia y en mi busqueda de la felicidad porque algo, que en mi interior que me decia que la vida era mucho más de lo que hasta ese momento había visto.
    Muchas gracias por tus palabras.

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